Tratamiento contra la Ansiedad

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Descubre nuestro tratamiento para la ansiedad no invasivo y eficaz con Neurofeedback y EMDR

Tratar la ansiedad con Neurofeedback y EMDR

Usamos técnicas que inciden en el sistema hiperactivado de la ansiedad, consiguiendo romper el circuito y crear redes neuronales alternativas más funcionales.

El EMDR permite desprogramar el inicio de la formación del trastorno, así como todas las situaciones que se le han ido asociando durante la vida de la persona.

El Neurofeedback se aplica para disminuir las ondas cerebrales excesivas implicadas en la ansiedad.

Mediante la terapia de entrenamiento mental, la persona es capaz de detectar y separar el pensamiento negativo amenazante consiguiendo una debilitación del sistema.

Beneficios del Neurofeedback y EMDR para el trastorno de ansiedad y la  ansiedad generalizada

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Preguntas y dudas sobre la Ansiedad Generalizada

El miedo es una emoción básica necesaria para nuestra supervivencia, pero en exceso puede convertirse en un límite que genera mucho bloqueo, invalidez y sufrimiento. La ansiedad puede manifestarse en forma de estado de nerviosismo y discomfort en general, de miedo de estar en lugares o situaciones de las que resulta difícil escapar, etc.

La ansiedad es un complejo sistema de reacciones fisiológicas, conductuales y cognitivas que se producen cuando estamos frente a una situación que creemos que puede perturbar la homeostasis del organismo, o ponernos en peligro de algún modo.

La peculiaridad de los mecanismos asociados a la ansiedad es que se activan incluso sin un estímulo externo directo y presente. Así pues, el mero hecho de pensar en el evento estresante en el futuro es suficiente para desencadenarlos.

El cerebro responde a una amenaza o peligro liberando hormonas del estrés, como la adrenalina y el cortisol. Aunque estemos tratando con un peligro que no sea real, estas hormonas provocan los síntomas físicos de la ansiedad. Una vez que la situación amenazante ha cesado, el cuerpo suele volver a la normalidad.

No todas las personas que padecen ansiedad experimentan los mismos síntomas, que distinguimos entre mentales y físicos. Los síntomas mentales de la ansiedad pueden incluir:

  • Pensamiento excesivo e incontrolable
  • Dificultad de concentración y atención
  • Sentimiento de temor, pánico o “fatalidad inminente”
  • Sensación de irritabilidad
  • Estado de alerta exagerado
  • Problemas de sueño
  • Cambios en el apetito
  • Deseo de escapar de la situación en la que se encuentra
  • Disociación

Los síntomas físicos de la ansiedad pueden incluir:

  • Sudoración
  • Respiración pesada y rápida
  • Asfixia
  • Sequedad de boca
  • Temblores
  • Pérdida de cabello
  • Latidos rápidos del corazón
  • Cansancio extremo o falta de energía
  • Mareos y desmayos
  • Dolores de estómago y náuseas

Si nos damos cuenta de que nuestra ansiedad no se explica fácilmente en relación con la situación en la que nos encontramos, si se prolonga en el tiempo, si sufrimos trastornos del sueño, o si sufrimos un estado de ánimo depresivo que no nos abandona y que a su vez no es fácilmente explicable, debemos consultar a un especialista, psicólogo o psicoterapeuta. Tanto el estrés como la ansiedad son abordables en una consulta de psicoterapia, donde se dan las mejores condiciones para crear un entorno seguro donde expresar problemas y encontrar juntos nuevas soluciones y perspectivas.

Durante una primera entrevista se evaluarán la demanda y las necesidades del paciente, poniendo especial atención en definir el tipo de tratamiento más indicado para la tipología y severidad de cada caso de ansiedad.

El terapeuta y el paciente deben trabajar juntos para evaluar si el plan de tratamiento está bien encaminado, por lo cual resultan fundamentales una cooperación mutua, y la claridad durante todo el proceso. En ocasiones resulta necesario realizar ajustes al plan, dado que los pacientes responden de manera diferente al tratamiento. Sin embargo, las posibilidades de una recuperación a largo plazo son muy buenas para la mayoría de las personas que buscan ayuda profesional.

El número de sesiones necesarias no es algo que se pueda determinar a priori, aunque podemos afirmar que la gran mayoría de personas que padecen trastornos de ansiedad pueden reducir o eliminar sus síntomas y retomar una vida normal tras varios meses de psicoterapia apropiada. También hay casos de personas que notan un progreso en la eliminación de síntomas y en la recuperación de su capacidad de funcionar, al cabo de unas pocas sesiones de tratamiento.

La primera investigación que encontró que el Neurofeedback provoca beneficios sobre la sintomatología ansiosa fue la de Hardt y Kamiya (1978). Casi al mismo tiempo, Passini et al. (1977) realizaron un estudio usando el Neurofeedback, que generó cambios significativos en el estado y rasgo de ansiedad.

Moore (2000) realizó una revisión de la literatura sobre el tratamiento con Neurofeedback de los trastornos de ansiedad e identificó ocho estudios de trastorno de ansiedad generalizada: tres estudios con trastorno de ansiedad fóbica, dos estudios de TOC y un informe sobre el uso de Neurofeedback con TEPT. Hammond (2005) señaló que el Neurofeedback se podía calificar como tratamiento probablemente eficaz para la ansiedad fóbica.

Peniston y Kulkosky (1991) realizaron un estudio con veteranos de Vietnam con TEPT que encontró una reducción significativa de la ansiedad. Los resultados perduraron para la mayoría de los sujetos más allá de los 30 meses.

Jones, M., & Hitsman, H. (2018) realizaron un estudio con 40 pacientes con sintomatología ansiosa. Pudieron observar que tras el entrenamiento en Neurofeedback estos síntomas mejoraron de forma significativa.

En publicaciones más recientes, como el metaanálisis de Russo et al. (2022), se ha podido concluir que los sujetos autoevalúan niveles de ansiedad más bajos tras someterse al entrenamiento en Neurofeedback.

¿Qué es un Mapeo Topográfico Cerebral y cuál es el procedimiento?

Para diagnosticar estos trastornos realizamos un Mapeo Topográfico Cerebral (EEG) a nuestros pacientes.

El procedimiento para una realizar este mapa cerebral no es invasivo, y no se administra ninguna corriente eléctrica al cerebro. 

Consiste en colocar un gorro con 19 sensores en la cabeza, el cual contiene pequeños electrodos para medir los patrones eléctricos procedentes del cerebro.

De este modo recogemos información sobre la eficiencia de la comunicación entre las diferentes partes del cerebro. 

Este procedimiento de evaluación nos permite entonces determinar de una manera científica y objetiva los patrones de ondas cerebrales de cada paciente y realizar, por tanto, una estrategia concreta para la mejoría y el equilibrio de la actividad neuronal para cada caso concreto.

¿Qué objetivo tiene el Estudio Neurometabólico?

Estudio neurometabólico donde valoramos función intracelular tiroidea; estudio de metabolitos de neurotransmisores como la dopamina, noradrenalina y serotonina. 

Los estados de inflamación crónica latente pueden también estar influyendo negativamente, y su tratamiento puede contribuir a la mejora de los síntomas de ansiedad. 

Estudio de ácidos grasos eritrocitarios para determinar la relación EPA/DHA Y AA, que también puede ayudarnos en el tratamiento.

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